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Noemí Villamuza, ilustradora del
ABCdario, presentó el libro en Madrid el jueves pasado. Pacientemente y con una sonrisa constante, hacía un dibujo diferente a cada uno de los que se acercaban a la mesa.
En el evento me encontré a mi alumno, de hace dos años, Luis Ávila.
Él no contaba con que yo fuese, así que cuando me vio, gritó: ¡LUCÍÍÍÍA!
Y toda la librería se enteró de que había llegado.
Después de un rato me dijo: Qué vergüenza, todo el mundo nos ha mirado.
A mi no me dio ninguna. Me encantó su entusiasmo.
Gracias por el enlace, Luis.
fotografía_ daniel galán conde
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